Torre del Aire, una revista digital de arte y cultura, es el más personal e interesante proyecto que he realizado.
Fue un proyecto de emprendimiento que realizamos en sociedad un buen amigo, profesor en el Conservatorio Profesional de Música de Salamanca y excelente programador cultural y yo mismo.
Torre del Aire fue un medio digital que ofrecía información y difusión de los programas culturales salmantinos, una herramienta para conocer en profundidad la agenda cultural de Salamanca y un lugar de encuentro y apoyo entre los agentes culturales y la sociedad salmantina.
Torre del Aire ofrecía en un único espacio la agenda de los acontecimientos culturales de Salamanca; artículos, entrevistas, reportajes y columnas de opinión y blogs especializados con análisis y acercamiento crítico a las distintas áreas de la cultura.
La fotografía y las artes plásticas y escénicas, la literatura, el cine y la música fueron las disciplinas que protagonizaron nuestro proyecto, que también abordaba ámbitos como el pensamiento, la sociedad y las tendencias.
Torre del Aire creía en la calidad y en el pensamiento innovador y crítico y quiso ser testigo y protagonista de la oferta cultural de Salamanca.
Pretendimos contar y analizar las propuestas culturales de calidad que ofrecían instituciones, empresas y promotores culturales e, incluso, impulsar nuevas iniciativas.
Lamentablemente, en los dos años que estuvo activo el proyecto, no encontramos los apoyos institucionales y privados tan necesarios para alcanzar los objetivos que nos habíamos marcado. Este era nuestro propósito.